Cuando pensamos en energía solar, lo primero que se nos viene a la cabeza son los meses de verano, con días largos y cielos despejados. Por eso, una de las preguntas más comunes que recibimos en Solar Go! es: ¿merece la pena una instalación solar en otoño? ¿Realmente las placas siguen funcionando cuando las temperaturas bajan y hay menos horas de luz?
La respuesta es clara: sí, las placas solares siguen funcionando perfectamente en otoño, y no solo eso: en muchos casos mantienen un rendimiento óptimo y ofrecen un ahorro constante durante toda la estación. Vamos a ver por qué.
¿Cómo afecta el otoño al rendimiento solar?
El otoño trae consigo días más cortos, temperaturas más suaves y un cambio en la intensidad solar. Es cierto que hay menos horas de sol que en verano, pero esto no significa que las placas solares dejen de producir energía. De hecho, siguen generando electricidad todos los días mientras haya luz solar, incluso con nubes.
Además, las temperaturas más frescas del otoño tienen un efecto positivo sobre los paneles. A diferencia de lo que muchos creen, el calor excesivo en verano puede reducir la eficiencia de los paneles. En cambio, en otoño las condiciones térmicas son más favorables para que trabajen de forma más eficiente.
Días más cortos, pero buena producción
En otoño hay menos horas de luz, sí, pero la mayoría de instalaciones están diseñadas para adaptarse a las distintas estaciones del año. En una jornada media de otoño en España, los paneles siguen produciendo energía durante varias horas al día, suficientes para cubrir una buena parte del consumo diario de un hogar medio.
Si además ajustas tus hábitos de consumo (por ejemplo, programar la lavadora, el termo o el lavavajillas en las horas de producción solar), puedes seguir ahorrando en tu factura de la luz.
¿Y qué pasa si hay días nublados?
Otro mito habitual es que los paneles no producen nada si el cielo está cubierto. Pero la realidad es que los paneles solares también funcionan en días nublados, gracias a la radiación difusa. Es cierto que su rendimiento se reduce, pero no desaparece.
En otoño, especialmente en zonas como Castilla-La Mancha, Madrid o la Comunidad Valenciana, seguimos teniendo muchos días con buena radiación solar, incluso aunque haya más variación meteorológica. Por tanto, la producción sigue siendo rentable.
Mejor rendimiento térmico
Una ventaja poco conocida es que las placas solares rinden mejor a temperaturas más bajas. Al igual que cualquier componente electrónico, los paneles trabajan más cómodos cuando no están sometidos a calor extremo.
Durante los meses de verano, los paneles pueden llegar a calentarse tanto que su eficiencia baja. En cambio, en otoño, las temperaturas moderadas ayudan a mantener una mayor eficiencia constante, compensando la pérdida de horas solares con mejor rendimiento por hora de producción.
Si tienes baterías, todavía mejor
Una de las mejores formas de aprovechar al máximo tu instalación solar durante todo el año, y especialmente en otoño, es instalar una batería solar. Esta te permite almacenar la energía que no consumes en el momento en que se produce y usarla más tarde, por la noche o en momentos de baja producción.
En otoño, cuando quizás pasas más tiempo en casa por las tardes y necesitas calefacción o iluminación, una batería puede ayudarte a seguir utilizando tu propia energía solar, aunque el sol ya se haya puesto.
Otoño: el mejor momento para instalar placas
Aunque mucha gente asocia las instalaciones solares con el verano, el otoño es en realidad una época ideal para instalar placas solares. Hay varias razones para ello:
- Evitas esperas: en verano hay picos de demanda y puede haber retrasos. En otoño, los plazos suelen ser más ágiles.
- Te preparas para el invierno: tener tu sistema instalado antes de que llegue el frío te permite ahorrar desde el primer día.
- Puedes aprovechar las ayudas activas y planificar tu ahorro antes de que acabe el año fiscal.
- Tu tejado trabaja todo el invierno: las placas siguen produciendo, y tú vas compensando mes a mes.
Además, si instalas en otoño, empezarás a compensar los excedentes generados desde ahora y llegarás a la primavera y verano siguiente con todo optimizado.
¿Cuánto se reduce la producción en otoño?
Es cierto que hay una bajada respecto al verano, pero no tan significativa como puede parecer. En España, un sistema solar puede producir entre un 20 % y un 35 % menos en otoño que en verano, dependiendo de la ubicación y el clima específico.
Sin embargo, este descenso se compensa con una menor demanda energética (si no usas aire acondicionado) y con un mejor rendimiento térmico de los paneles. Además, con una instalación bien dimensionada, puedes seguir cubriendo entre el 60 % y el 90 % de tu consumo diario sin problema.
¿Qué mantenimiento requieren las placas en otoño?
Muy poco. Uno de los grandes beneficios de la energía solar es que las instalaciones requieren un mantenimiento mínimo. En otoño, puedes aprovechar para:
- Hacer una revisión visual y asegurarte de que no hay hojas secas acumuladas.
- Comprobar que no hay sombras nuevas generadas por árboles que cambian de tamaño o por construcciones cercanas.
- Confirmar que el inversor y la monitorización funcionan correctamente.
En Solar Go! ofrecemos servicio postventa y seguimiento, para que tu sistema esté siempre funcionando al máximo nivel.
Conclusión: sí, las placas solares funcionan perfectamente en otoño
El rendimiento de las placas solares en otoño sigue siendo más que suficiente para justificar su instalación y asegurar un ahorro constante. Gracias a las condiciones térmicas, a la producción constante durante el día y a la posibilidad de combinar el sistema con baterías, las instalaciones solares continúan siendo rentables durante todo el año.
Si estás pensando en dar el paso hacia el autoconsumo, no tienes que esperar al verano. El otoño es un momento ideal para instalar placas solares, empezar a ahorrar cuanto antes y prepararte para el invierno con un sistema eficiente y sostenible.



